Varios alimentos son los causantes de flatulencias que
se producen en el organismo durante el desarrollo de la digestión. Hay personas
más propensas que otras. Una dieta sana es fundamental para prevenirlos
La alimentación y en general los hábitos
alimenticios constituyen el desarrollo de gases en el intestino grueso,
como parte del proceso de digestión. Su expulsión se da a través del recto como
flatulencias, o bien por la boca en forma de eructos. Si la producción se
vuelve excesiva o se retienen pueden producir dolores abdominales de leves a
intensos, además de convertirse en un problema estético y hasta vergonzoso.
El doctor especialista en gastroenterología, Roberto
Romero, explica que “en el colon
coexisten normalmente un grupo de gases como: oxígeno, hidrógeno, carbono y
metano, derivados del consumo de los alimentos. Cuando comienza la degradación
de la flora saprofita, inicia la liberación de hidratos de carbono, generando
la flatulencia”.
Dependiendo de la cantidad y el método de preparación
de los alimentos que consuma una persona, el organismo puede generar gases,
sostiene el Dr. Romero, quien además agrega que “estas comidas son las que contienen alto contenido de
grasas saturadas, frituras, azúcar refinada, bebidas gaseosas y embutidos como
salchichón, quesos amarillos, entre otros”.
Recomienda que las personas adquieran buenos hábitos
alimenticios, no caigan en excesos a la hora de comer o beber, sin importar la
ocasión o motivo de la ingesta, para que el proceso digestivo siga su curso
normal y no sientan cólicos abdominales o pesadez estomacal.
Elia Y. Pacheco I.
Periodista
Periodista
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